La Agrupación de Comunidades de Regantes de Caravaca de la Cruz (ARECA) denuncia que «el ayuntamiento de la ciudad viene extrayendo el doble de lo permitido por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) , lo que sumado al imparable aumento de los regadíos ilegales, pone en serio perjuicio de las fuentes más cercanas».

ARECA reúne a 15 comunidades  de regantes (Los Ojos de Archivel, Benablón, El Hacho, Barranda, La Fuente de Caneja, La Fuente de Singla, Las Tosquillas, la Fuente de Navares, Minas-Santa Inés, Carles, los Miravetes, Las Fuentes del Marqués, La Muralla, Mayrena y Los Viñales) que suman más de 3.000 hacendados y más de 3.600 hectáreas, que utilizan aguas de manantiales.

En su última Junta General Extraordinaria han acordado la presentación de alegaciones contra «la regularización para abastecimiento de más de 500.000 m3/año, que de hecho se vienen extrayendo de dos pozos, por encima de la concesión, rebasando en un 52% lo autorizado».

Los regantes aseguran que «no está justificado este notable aumento de concesión; que no se han estudiado todas las alternativas; que parte de esa agua se deriva irregularmente a zonas que se deberían de abastecer del Taibilla, lo que consideramos muy grave; y que en todo caso se debe tender a reducir las extracciones de aguas subterráneas».

Según los regantes, «del pozo de Caneja se extrae un volumen muy elevado (cerca de 1.200.000 m3/año), en imparable aumento en los últimos 15 años, que amén de las pérdidas por falta de mejoras que no se han realizado en las redes, asume zonas muy próximas al Casco Urbano, como son los polígonos de Santa Inés y el Cementerio, hasta el Bonete, a escasos 600 m del casco urbano y fuera del ámbito de las pedanías. Estas zonas pegadas al final de la autovía hasta el límite con Cehegín se tendrían que estar abasteciendo del Taibilla, según lo previsto en el Plan de Cuenca del Segura, dado que el uso de aguas subterráneas para abastecimiento debe ser excepcional en aquellas zonas donde no llegue otro recurso, como es el Taibilla. Calificamos este hecho de muy grave y debe corregirlo la empresa concesionaria ya, como así se lo haemos pedido al concejal de agricultura de Caravaca».

ARECA también denuncia que «en lo que va de año hemos detectado más de 100 hectárea de nuevas de secanos puestos de regadío, por lo que se está agotando totalmente la paciencia de los regantes. Por esa hemos acordado poner ya en manos de la Fiscalía los casos más abusivos de regadíos ilegales que perjudican seriamente a la mayoría de las fuentes».