El yacimiento romano ‘Los Cantos’ es por primeara vez escenario de un curso internacional de arqueología de campo, desde el 6 hasta el 20 de agosto, en el que estudiantes de diversas procedencias y voluntarios van a participar directamente en la campaña de excavación. Durante ese tiempo desarrollarán aspectos fundamentales como la estratigrafía, fotogrametría, topografía, dibujo de campo, inventario de materiales, etc…
Las excavaciones y el curso están impulsados por el Ayuntamiento de Bullas, a través del Museo del Vino, y por el Centro de Estudios del Próximo Oriente y la Antigüedad Tardía de la Universidad de Murcia; y cuentan con el patrocinio de la Asociación Ruta del Vino de Bullas y la Fundación Cajamurcia.
La ‘Villa de Los Cantos’ es una gran hacienda agrícola de época romana que tuvo su periodo de plena actividad entre los siglos I y IV d.C. Se ubicaba en un área de gran interés económico para la aristocracia hispano-romana (producción de vino, aceite, cereales), de alto valor paisajístico y en un cruce de caminos que unían Carthago Nova con las Sierras del Segura y el interior de la península.
El asentamiento ocupa un espacio de 10.000 m2 y se compone de un gran edificio que funciona como residencia de los propietarios de la villa, un complejo termal y la zona industrial dedicada a la manufactura y almacenamiento de la producción agrícola y ganadera. Contó también con una zona ajardinada en la que en su día fueron halladas diversas esculturas que funcionaban como surtidores de agua; entre ellas el ‘Niño de las Uvas’ y otras tres que han sido recuperadas recientemente por agentes de la Guardia Civil, dentro de las operaciones del Plan para la Defensa del Patrimonio Histórico Español .
Actualmente, el yacimiento se encuentra en una fase incipiente de investigación pero los hallazgos hasta ahora encontrados vislumbran un futuro prometedor. Algunos de sus descubrimientos son realmente interesantes, como la existencia de un mirador incorporado a la zona residencial o el descubrimiento parcial de lo que parece ser un complejo termal de doble horno, sin olvidar la presencia de uno de los escasos ejemplos conservados de puertas de acceso a la villa. De especial relevancia para Bullas son los hallazgos vinculados a la producción vitivinícola, con restos encontrados de un posible lagar, además del mencionado hallazgo del conocido Niño de las Uvas.
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