Las últimas informaciones sobre el tiroteo de anoche en Bullas apuntan a que los hechos sucedieron durante la celebración de una boda por una riña familiar.
Al parecer, el guardia civil jubilado de 63 años autor de los disparos se había inscrito con su pareja, por la mañana, en el Registro de Uniones de Hecho.
Horas después, por motivos que aún se investigan, y en la casa que compartía con la mujer, originaria del Este de Europa, discutió con dos yernos de ella, de 35 y 38 años, y les disparó con una escopeta de caza en el abdomen, con la que después se quitó la vida.
Ocurrió en el barrio de la Cruz, en la calle San Francisco. Los heridos se encuentran ingresados en estado muy grave en el Hospital Comarcal del Noroeste.
El municipio de Bullas está conmocionado por los hechos. La alcaldesa, María Dolores Muñoz, ha declarado a un medio regional que «es un hecho tráfico que nunca antes habíamos vivido. Pedimos el máximo respeto para los familiares a quiénes les presentamos nuestras condolencias».
Muñoz añade que «la seguridad del resto de vecinos del barrio estuvo controlada en todo momento. Ahora esperamos que la normalidad regrese cuanto antes al barrio de la Cruz».
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