El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo se ha comprometido hoy en Caravaca de la Cruz a colaborar con la Región de Murcia para la promoción y gestión del Año Jubilar 2017. Ha sido, tal como estaba previsto, mediante la firma de un acuerdo rubricado por el presidente gallego y su homólogo murciano, Pedro Antonio Sánchez.
Núñez Feijóo ha señalado que «lo que queremos hoy es unir los caminos de la Vera Cruz con los caminos de Santiago y trasladar el firme compromiso de Galicia, tanto a la comunidad murciana como al Ayuntamiento de Caravaca, para vincular más estas dos ciudades santas y los caminos de la peregrinación, de la espiritualidad, de la vida».
El alcalde José Moreno, ha destacado que «Caravaca de la Cruz y la Región de Murcia tienen mucho que aprender y que ganar con la experiencia que la Xunta de Galicia ha adquirido durante su larga trayectoria como destino de referencia de peregrinación a nivel mundial, sobre todo en lo referente a la gestión de un acontecimiento de tales características. Son dos años jubilares que están llamados a complementarse».
Y ha añadido que «nos quedan ocho meses para comenzar una etapa muy interesante tanto para la Comunidad de Murcia como para el Ayuntamiento de Caravaca. Se está desarrollando una labor conjunta de promoción necesaria, pero hay que ir más allá y prestar atención a la seguridad, a las infraestructuras, a cómo se van a canalizar los flujos de peregrinación y que éstos no sólo beneficien a Caravaca sino al conjunto la comarca y de la Región».
Santiago de Compostela y Caravaca de la Cruz comparten un acontecimiento de especial interés cultural, turístico y religioso, como es la celebración de un Año Jubilar. Galicia celebra el Año Xacobeo con carácter periódico, con una tradición secular, en concreto desde el año 1126. El jubileo moderno comenzó en 1993 y se ha convertido en un evento de repercusión mundial.
Por su parte, Caravaca de la Cruz conmemora desde 2003 un Año Jubilar cada siete años, tras la concesión realizada por el Papa Juan Pablo II que reconocía la larga historia de culto y peregrinaje en torno a la Santísima y Vera Cruz, desde la Edad Media hasta la actualidad. Son, por tanto, dos de las tres de las ciudades españolas que celebran un jubileo perpetuo, junto con Liébana, y, a nivel internacional, se suman únicamente Roma y Jerusalén.
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