Un niño de 5 años se ha precipitado esta mañana desde uno de los miradores del vallado situado a metro y medio de altura en el exterior de la barrera de seguridad en Calasparra.

El menor se encontraba acompañado por familiares en el momento de la caída que se ha producido en el mismo instante en el que pasaba el encierro, al inicio de la calle Ezequiel Ordóñez. El niño, afectado de una contusión en la cabeza y con pérdida de conocimiento, ha sido trasladado rápidamente a la enfermería de la plaza de toros donde ha sido atendido en primera instancia por el Doctor Ricardo Robles  para, más tarde, ser trasladado, ya consciente,  al Hospital Comarcal de Caravaca de la Cruz.

En cuanto al encierro, ha sido rápido. Los novillos-toros de Partido de Resina han tardado 2,40 minutos en completar el recorrido.   La manada ha corrido compacta y  arropada por un gran número de corredores que han protagonizado arriesgadas y bonitas carreras. A la entrada a la plaza, ha estado a punto de hacerse un tapón entre corredores y manada. Salvo algún apuro y apretón, la situación se ha resuelto finalmente bien y los sanitarios solo han tenido que atender contusiones.