La cortijada de la Carrasquilla, en Cehegín, un enclave precioso que, mirando tiempo atrás en la documentación, nos indica, claramente, como eran las zonas rurales de la villa en sus aspecto socioeconómico.
En el año 1898 la pedanía tenía 60 casas, en las que residía una población total de 225 habitantes. Entre los oficios de los que se hallaban en edad de trabajar encontramos, como en las demás pedanías, un elevado número de jornaleros y de colonos, así como algunos propietarios de tierras.
También había algunos mineros, sin duda relacionados con el trabajo en las minas de hierro que florecieron en Cehegín a finales del siglo XIX y parte del XX, y de las cuales algunas se hallaban desde los cabezos cercanos hasta la vecina pedanía de Gilico.
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